Desde hace algunos días, en el centro de flores que adorna el cuadro de la Misericordia Divina, que como ya hemos comentado se encuentra en el lateral izquierdo del Convento de las Descalzas, hay un pequeño papel, escrito a mano, y que, de forma totalmente anónima, agradece a la Misericordia Divina una importante gracia concedida. Desconocemos por completo quien es la esta persona, aunque sí convencidos, que Dios, en su Misericordia Bendita, la ha escuchado. Dado que a través de las fotos no se puede leer el texto con una mínima calidad, lo reproducimos textualmente, para gloria de Dios y su Misericordia. Dice así: "Hoy vengo a tí, Santísimo Cristo de la Misericordia, porque tengo mucho que agradecerte. Quiero darte las gracias porque me has curado de este tumor. Gracias Padre Mío, quien en tí confía, Tu le ayudas. Nadie debe dudar esto. Sigue ayudándome hasta el final, dame pruebas para seguir luchando. No me abandones, no me dejes sola, Padre Mío. Gracias por guiarme, por levantarme cuando me caigo. Por estar cada día a mi lado y, con tu ayuda, salir de esta enfermedad. YO CONFÍO EN TI".
Trás leerlo, es el momento de que cada uno de nosotros saque sus propias conclusiones, aunque los devotos, seguidores y el Grupo Misericordia Divina de Badajoz, estamos convencidos de que Cristo siempre escucha nuestras plegarias.
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